Ubicada en un entorno natural privilegiado, en la zona este de Mallorca, esta impresionante finca rústica se alza sobre una parcela de 35.000 m² de terreno privado, a escasos minutos de Artà, el campo de golf de Capdepera y las idílicas playas de Cala Ratjada.
Con una superficie construida de 561 m², la propiedad ha sido concebida como un refugio de paz, elegancia y confort. El proyecto arquitectónico, firmado por un reconocido profesional local, destaca por su integración armónica con el paisaje mallorquín, utilizando materiales tradicionales reinterpretados con una visión contemporánea.
En su interior, la finca ofrece cuatro amplios dormitorios con baño en suite, además de un aseo de cortesía. Cada espacio ha sido cuidadosamente diseñado para ofrecer calidez, funcionalidad y luz natural, con una distribución abierta que conecta el interior con el exterior de forma fluida. La elección del mobiliario y la decoración, realizada por un prestigioso diseñador de interiores, aporta una identidad estética única, donde el lujo se expresa a través de la simplicidad, la calidad y el detalle.
La finca dispone de varias terrazas, zonas ajardinadas y áreas chill-out ideales para el descanso o el entretenimiento. La piscina, orientada estratégicamente para captar el sol y las vistas despejadas del entorno rural, se convierte en el epicentro del estilo de vida mediterráneo que esta propiedad encarna.
Una propiedad ideal para quienes buscan una residencia de diseño, con carácter, privacidad y proximidad tanto al mar como a pueblos con encanto y servicios de calidad.
Una joya arquitectónica en el corazón del paisaje mallorquín.
