Exclusiva propiedad de 214 m² de terreno urbano situada en primera línea de mar, en una encantadora calle peatonal. Su ubicación es inmejorable, con vistas directas a la isla de Cabrera desde toda la casa y acceso al mar y a la playa.
La vivienda, una auténtica casa de pescadores construida en 1940 y reformada en 1990, cuenta con unos 88 m² distribuidos en una planta y media. Dispone de tres dormitorios (dos con techos muy altos), un baño completo, cocina con chimenea y un salón en dos niveles también con chimenea.
Muy luminosa y con gran altura, ofrece además un patio/terraza trasera de unos 79 m² con zona de porche cubierto de unos 18 m² y barbacoa, un garaje privado de unos 29 m² con aseo de cortesía, lavandería y espacio de almacenaje, y una terraza superior de aproximadamente 29 m² situada sobre el garaje con vistas al mar y a la playa.
Las posibilidades son amplias: se puede reformar la casa existente añadiendo hasta dos alturas más, construir una villa de lujo de tres plantas o desarrollar varios apartamentos.
Al no poder edificarse alrededor, las vistas y el acceso directo al mar quedan garantizados. Una oportunidad única en una de las zonas más codiciadas de la isla.
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